"200 ARBOLITOS CELEBRANDO A MEXICO"
"Más de 200 arbolitos celebrando a México"
INPOJUVE Y EUTORNO AC. LIMPIA Y REFORESTAN EL RÍO ESPAÑITA
El accidente petrolero del golfo de México
José Sarukhán
José Sarukhán | El Universal | 14 de Mayo de 2010
El miércoles pasado participé en una rueda de prensa destinada a comentar la situación en que se encuentra el derrame de petróleo causado frente a la costa de Louisiana por la explosión y hundimiento de una plataforma de perforación en aguas profundas del golfo de México. Debido al interés y a la reiteración de las preguntas de los reporteros presentes en la entrevista en la Secretaría de Marina, con la participación del secretario almirante, pensé que sería interesante dedicar esta entrega al tema, tanto por la dimensión del problema para las condiciones ambientales de buena parte de la costa de Estados Unidos, como por los eventuales efectos que este derrame podría llegar a tener en nuestras costas y aguas mexicanas.
La explosión que desató el evento del derrame ocurrió el 21 de abril; desde entonces no ha parado el flujo de crudo a un ritmo cercano a los 800 mil litros diarios, lo que representa a estas alturas unos 20 millones de litros petróleo. La mancha de petróleo se ha ido desplazando lenta, pero consistentemente, hacia el norte acercándose a la costa de Louisiana y sigue situada justo enfrente de la desembocadura del río Mississippi; vista en una imagen de satélite a la escala de la vastedad del golfo de México, aparece de un tamaño muy modesto, a pesar de tener más de 1,200 km cuadrados. Si situásemos la extensión de la mancha sobre el espacio del Distrito Federal, veríamos que lo cubre totalmente, más 25% del estado de Morelos, casi 30% del estado de México, y entre 5 y 7% de los estados de Hidalgo, Tlaxcala y Puebla, lo cual da una mejor idea de su extensión.
Los bordes del derrame se encuentran a unos 900 km de la parte más norte de la costa de Tamaulipas y a unos 750 del norte de la península de Yucatán. La presentación de estos datos puede verse en www.conabio.gob.mx.
La tendencia de los vientos en esta época del año es hacia el norte y noreste, lo cual significa que mientras esta situación se mantenga, las probabilidades de afectación a la costa mexicana a la distancia que se encuentra el derrame, son en extremo bajas. Sin embargo, en unas cuantas semanas dará inicio la temporada de tormentas tropicales y los ciclones y su efecto en el desplazamiento de la mancha de petróleo, especialmente de los últimos, es difícil de predecir por lo variable de sus trayectorias. Lo que parece claro es que, incluso con una tormenta tropical no demasiado intensa, que produzca olas de un par de metros de alto, las defensas de barreras de plástico y de piedra que se han instalado en partes de la costa de Louisiana para proteger los extensos e importantes humedales de la zona, serían del todo insuficientes para impedir que el crudo penetrase tierra adentro.
Resulta claro que lo que México tiene que hacer ahora es mantener contacto con las instancias pertinentes que están responsabilizadas de la situación en EU (Guardia Costera y Secretaría del Interior, cosa que está ocurriendo), monitorear con nuestra capacidad instalada de sensores remotos el derrotero de la mancha de petróleo y el efecto que los ciclones puedan tener sobre su ubicación y fragmentación, y dedicar atención a las especies migratorias que llegan a nuestro territorio, tanto de mamíferos como tortugas y algunas aves, que podrían resultar afectadas por tener contacto con las manchas de crudo.
Afortunadamente, la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) cuenta con buenas estimaciones de las colonias de anidación de tortugas lora y laúd, que podrían ser especialmente vulnerables si el crudo llegase a las playas mexicanas. Necesitamos estar alertas, reaccionar con prontitud y valorar daños a la diversidad biológica de México, en caso de que el petróleo llegase a nuestras costas.
El impacto del agua embotellada y por qué hoy es el día perfecto para dejarla
El agua embotellada, en la mira. ©Aloha Team.
Con motivo del Día Mundial del Agua (http://www.worldwaterday.org/), que nació como iniciativa de la llamada Cumbre de la Tierra de Río de Janeiro en el año 1992 y se celebra cada 22 de marzo, el proyecto La historia de las cosas (The Story of Stuff) lanzó una nueva entrega de sus reveladores videos. Esta vez, apropiadamente, sobre la industria del agua embotellada.
En La historia del agua embotellada, la activista Annie Leonard explica cómo hicieron los ejecutivos de las empresas productoras de bebidas para hacernos creer que el consumo de agua de la red es malo y por qué esta industria muchas veces innecesaria es terriblemente dañina para el medio ambiente.
Con una entretenida animación de unos nueve minutos, el video explica cómo la industria del agua embotellada fue creada por medio de la 'demanda manufacturada'. Es decir: nadie pensaba que era lógico pagar por agua hasta que campañas de comunicación comenzaron a hacer creer a la gente que el agua de la canilla no era saludable.
Mientras las botellas de agua demuestran fotos de la naturaleza y evocan pureza, la enorme cantidad de plástico utilizado en ellas que es producido, transportado y desechado cada día, está generando toneladas de emisiones de carbono y basura (mucha de ella, que termina en los océanos como parte de las grandes manchas de basura del Pacífico y del Atlántico).
Además, en muchos casos introducir las botellas al tacho de reciclaje no es suficiente, ya que las mismas terminan exportándose a países en vías de desarrollo para su tratamiento y disposición final, y no siendo recicladas para producir nuevos envases.
La controversia alrededor del consumo de agua embotellada no es nueva, pero en los últimos años la discusión estuvo creciendo tanto que algunas personas aseguran que, en poco tiempo, el tomar agua embotellada tendrá una imagen equivalente al fumar.
Más allá de estas acusaciones y enfrentamientos, este Día Mundial del Agua es una perfecta ocasión para preguntarse cuán necesario es el consumo de agua embotellada en nuestro caso.
Si el agua de red de tu casa es potable, comenzá hoy a renunciar al hábito y dejá de gastar dinero y generar basura innecesariamente. Si en tu caso es necesario, averiguá si con un filtro podrías solucionar el problema o qué formas alternativas de conseguir agua existen en tu ciudad.
Y, por supuesto, aprovechá este y todos los días que vienen para cuidar este valioso recurso.
Abandonar el usar y tirar
Sabemos que la cultura del usar y tirar está llegando a su fin, y por muchos motivos debemos optar y escoger soluciones que sean más duraderas para reducir el uso de recursos naturales y de energía, el transporte y finalmente la gestión del residuo.
En algunos aspectos parece que se van encontrando soluciones. Recientemente se está cambiando de forma importante el uso de las bolsas de plástico de los supermercados y otros establecimientos, promoviendo el uso de receptáculos más resistentes y/o haciendo pagar de forma específica las bolsas más contaminantes. El cambio genera algunas resistencias, pero al fin se va asumiendo como algo inevitable.
En otros usos parece que cuesta más desprendernos de estas “comodidades modernas” a las que nos hemos acostumbrado, y que vemos que resuelven nuestras necesidades, sobre todo en la cocina.
Pero así como algunos fabricantes se empeñan en desarrollar productos totalmente inútiles y disparatados, otros ingenian buenas soluciones que debemos tener en cuenta. Por un lado, hablaremos de envoltorios para llevar la comida. Un día se inventó el papel de aluminio y el film transparente, y empezaron a reinar en el mundo de los bocadillos, desayunos y meriendas de chicos y chicas, excursionistas y viajeros. La solución era práctica, pero tiene el problema de usar recursos materiales valiosos con una duración de uso muy corta, que en seguida se ven convertidos en basura y, todo hay que decirlo, no siempre acaba depositada en el lugar correspondiente para su reciclaje.